Incubar una idea u otra por cuatro o cinco años es
lo que hace la mayoría de la gente. Simplemente comience.
Aprenderá muchas
lecciones haciéndolo. Confíe en el proceso y en su idea.
A principios de este año, experimenté una de esas
afortunadas coincidencias que hacen que la vida sea interesante.
Casi al mismo tiempo en que yo empezaba a contar
los días para el estreno de la nueva película de Virgin Produced, ‘Jobs’, que
muestra la vida como emprendedor del fundador de Apple, Steve Jobs, cené con un
grupo maravilloso de emprendedores que incluyó a Tony Fadell de Nest, Mike
McCue, de Flipboard y Dave Morin de Path, junto con el director ejecutivo de
Twitter, Dick Costolo.
Tony y Dave trabajaron en Apple al inicio de sus
carreras, de manera que, por supuesto, les pedí me contaran más anécdotas sobre
Steve, el emprendedor al que más admiro.
Tony fue el hombre detrás del revolucionario iPod
de Apple.
Al inicio de su carrera en Apple, Tony se acercó a
Steve Jobs con el concepto inicial, y luego trabajó en la creación y desarrollo
de 18 generaciones de iPods y tres generaciones de iPhones.
Tony habló bastante del estilo de liderazgo de
Steve y cómo afectó a la compañía.
Es bien sabido que Steve presionaba a sus empleados
para alcanzar resultados deslumbrantes, demandando la perfección, y que era
rápido para criticar cuando las cosas no iban bien. Y su gente superó el
desafío: Las cosas salieron muy bien con el iPod, el cual transformó a la
industria de la música.
Tony sentía que sin importar cuán bueno fuera un
producto, Steve nunca pensaba que fuera perfecto. Parte de este impulso hacia
la perfección significó que Steve no diera marcha atrás: No se podía ganar una
discusión con él a menos que uno pudiera respaldarla con datos fríos y duros.
Y Steve ganaba casi todas las discusiones basadas
en opiniones.
Si Tony y su equipo necesitaban ganar una discusión
basada en opiniones, el equipo conspiraba antes de la reunión con Steve,
esperaba hasta el momento crítico durante esa reunión, discretamente
pronunciaba la palabra "¡ahora!" y luego todos se inclinaban hacia
adelante al mismo tiempo y presionaban contra los deseos de Jobs.
La creencia de que siempre se pueden hacer las cosas
mejor es algo que distingue a los emprendedores grandiosos, y ayuda a
impulsarlos hacia éxitos futuros. Los creadores nunca están totalmente
satisfechos. Siempre pueden hacerlo mejor.
La visión y empeño de Steve en ello resultaron en
que el equipo del iPod desarrollara una enorme cantidad de productos y
versiones antes de que sintieran que habían alcanzado su objetivo y siguieran
adelante con un lanzamiento.
Este es un proceso largo y solitario en una
compañía; como dijo Dave: “Nadie recuerda cuando no podíamos vender los iPods y
regalamos uno a cada estudiante de la Universidad de Duke para darlo a conocer.
Puede llevar mucho tiempo crear una compañía”.
Cuando llegamos al tema de en qué proyectos estamos
trabajando ahora, Tony por supuesto habló sobre su maravillosa nueva compañía,
Nest, la cual ha desarrollado un termostato que aprende los horarios de las
personas, reduciendo la generación de carbono y las facturas de electricidad en
sus casas en hasta 20 por ciento.
Como era de esperarse, él y su equipo están
trabajando también en muchos otros productos interesantes.
La cultura de una compañía da forma a todo, desde
cómo lucen sus productos hasta cómo el personal de servicio a clientes responde
al teléfono, así que la cultura de cada compañía debería ser un poco diferente
y menos dictatorial que la de Apple.
Él ayuda a todos en el grupo a comprender su papel
vitan en sus éxitos y a trabajar para alcanzar esos objetivos.
Por otra parte, Nest comparte el enfoque de Apple
en el diseño brillante. Tony afirmó que así como hacer productos prácticos y
excelentes, esto es esencial para que cualquier compañía sea competitiva:
"Se debe tener una apariencia genial y un desempeño genial".
Esto da a los clientes razones lógicas y
emocionales para invertir en una marca.
Como dijo Tony: “La tecnología debería girar en
torno de más que lo más nuevo, lo más ruidoso y lo más lindo. Debería marcar
una diferencia”.
Y Dave comentó que el estímulo para un diseño
grandioso debe provenir de arriba. Todos en una compañía deberían interesarse
en cómo luce, se siente y funciona un producto; no solo los tipos con la
palabra "diseño" en sus títulos laborales.
Las compañías necesitan directores ejecutivos con
buen gusto en el diseño, así como necesitan contadores que sean grandiosos con los
números.
Conforme la cena se acercaba a su fin, todos
hablaron sobre qué consejo pudiéramos tomar de nuestras experiencias que fuera
útil para los nuevos emprendedores.
Coincidimos en que sería: Simplemente comiencen.
Incubar una idea u otra por cuatro o cinco años es lo que hace la mayoría de la
gente. Simplemente comiencen. Aprenderán muchas lecciones haciéndolo.
Comiencen. Confíen en el proceso, confíen en su
idea y confíen en su equipo.
Tuvimos una conversación estupenda durante nuestra
comida. Hubiera sido grandioso que Steve aún estuviera aquí para que se nos
hubiera unido.
Aprenderá muchas
lecciones haciéndolo. Confíe en el proceso y en su idea.
Por:
Richard Branson
Fundador de Virgin Group y firmas como Virgin
Atlantic y Virgin America.
Texto tomado portafolio.co de su publicación
"Consejo de un grupo de visionarios: simplemente comience"
Fecha de Publicación 13 de septiembre de 2013
La información aquí contenida es de naturaleza general y no tiene el propósito de abordar las circunstancias específicas de ningún individuo o entidad en particular. No tiene motivos económicos y no se puede entender como una asesoría al tema expuesto por el autor.
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